LA MUÑECA ROTA
Una niña diminuta y delicada, cómo un pétalo de rosa blanca
vestida cómo una muñeca de trapo, perfecta y rota
deambulaba por la arena de la playa, sola..
No parecía una niña,
parecía un ave que le faltaban plumas y ganas de volar.
Su sonrisa de porcelana antigua
hundiéndose lentamente en el mar.
Lágrimas le llovían en la cara,
mojaron su ropa de muñeca rota
se metían en su boca, cómo miles de gusanos blancos
recorrían sus manos,
se mezclaban con los mechones de pelo dorado
que le llovían en su cara, de agua sucia y pálida.
Devoraban sus ojos
nublaban su mirada
le traspasaba la piel entera,
dejándole una mancha permanente, que no se ve,
una mancha que va creciendo dentro de las venas,
acariciando la sangre,
tiñéndola de tristeza..
Cómo viboras saladas atravesaban su cuerpo
impulsándola a correr y escapar desesperadamente
hacia la puerta de salida...
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